jueves, 31 de enero de 2013

Cómo sobrevivir a una subrogación (IV)

Voy a hablaros hoy del tema en el que soy un experto absoluto. ¿Sexo? Podría ser, pero esta vez trataremos el tema de vuestros contratos. 

Como trabajador en el departamento de administración y al encontrarnos a apenas dos semanas del fatid… digo del fantástico día en el que nos cambiaremos de empresa, hoy he recibido la siguiente orden de mi inmediato superior (bueno, de uno de mis inmediatos superiores ya que casi todos lo son): 

-Zacarías, tienes que tener preparados para esta tarde todos los contratos, que van a venir de Clece a recogerlos. 

-¿Cómo? ¿Todos los contratos? –contesté tratando de mantener la compostura. 

-No hombre –escuché aliviado-. Los contratos, las transformaciones a indefinido, la última modificación de cada contrato y un informe de 50 páginas acerca de la vida del armadillo gigante. 

Cuando me recuperé del desmayo gracias a la ayuda de mis compañeros que me tiraron un cubo de agua a la cara me puse manos a la obra. Sí amigos, hoy me he dedicado a despojar de vuestros expedientes los contratos que con tanto cariño he elaborado durante más de tres hermosos, largos y agotadores años (el primero hermoso, el segundo largo y el tercero agotador). 

Sin embargo no hay que preocuparse por el destino de esos contratos, una vez pasen a la nueva empresa éstos serán analizados punto por punto, cláusula por cláusula y cuatro por cuatro (16). No olvidéis el sublime final de esos contratos, una vez todo esto termine pasarán por una máquina trituradora y se convertirán en un divertido confeti que nuestros nuevos jefes utilizarán para celebrar nuestro despido. 

martes, 29 de enero de 2013

Bola de dragón

Un malo de Bola de Dragón quiere (como no) conquistar el universo. Para ello decide despertar de su letargo a un monstruo ultrapoderoso que ha llevado dormido miles de años. Cuando éste despierta le dice: 

-¡Hola! Yo soy el que ha conseguido despertarte, a cambio te ofrezco que seas mi súbdito a partir de ahora. 

A lo que el monstruo le contesta: 

-Lo siento, no tengo tiempo, tengo un universo que conquistar. 

Y en seguida mata al malo con un dedo, el dedo meñique. Entonces el monstruo, que también tenía ese propósito, conquista el universo venciendo a Goku y toda su pandilla en luchas de aproximadamente 400 capítulos. Es demasiado fuerte y nadie puede vencerlo. La última esperanza es reunir las bolas mágicas y resucitar al malo porque él tiene el conjuro para volverlo a dormir. 



Las consiguen, llaman al dragón mágico y resucitan al malo. 

El malo llega otra vez a estar frente al monstruo y cuando parece que va a producirse la batalla final éste le dice: 

-Oye, que lo he estado pensando y acepto lo de ser súbdito tuyo. 

Era un monstruo muy civilizado pero con un mal despertar. Cuando terminó de conquistar el universo había tenido tiempo para pensar en la oferta que le hicieron nada más despertarse.

domingo, 27 de enero de 2013

Abogado acristalado

Un buffet de abogados famoso en la ciudad porque ganan el cien por cien de los casos. Citan siempre a sus clientes en un despacho muy elegante y lujosamente decorado donde hay una mesa de cristal muy cara.


Hacen a los clientes sentarse a la mesa y en cuanto éstos se apoyan en ella, ésta se rompe. Todos los casos del buffet son demandas contra sus clientes por romperles la mesa. Siempre ganan.

jueves, 24 de enero de 2013

Cómo sobrevivir a una subrogación (III)

Si vas a vivir próximamente una subrogación seguramente te estarás preguntando (y no lo has hecho ya va siendo hora que lo hagas) si la nueva empresa mantendrá las condiciones de trabajo de las que actualmente disfrutas y que casi te hacen sentir un funcionario. Eres un privilegiado y lo sabes así que ve bajando de la nube. 

Las opciones a las que tradicionalmente podía optar la nueva empresa eran tres: 
1. Hacer que trabajes más pagándote lo mismo. 
2. Hacer que trabajes más pagándote algo menos. 
3. Hacer que trabajes más pagándote una mierda. 

Afortunadamente (para la empresa entrante) la nueva reforma laboral ha reducido las opciones y por lo tanto eliminado la incertidumbre que en este sentido se producía, a la siguiente: 
1. Hacer que trabajes más en el horario que me dé la gana pagándote un mojón. 

Sin embargo la nueva empresa es consciente del desasosiego que esta iniciativa puede ocasionar en el trabajador y pondrá los medios necesarios para que éste se sienta a gusto y se le pasen las horas volando. Para empezar la nueva oficina carecerá de ventanas, ventanillas, cristaleras o cualquier abertura en sus paredes que dejen ver el exterior. Esto evitará que el trabajador sienta la tentación o mera necesidad de salir fuera si hace buen tiempo, saber si es de día o de noche o simplemente quedarse embelesado si llueve. Otra importante iniciativa a la que llegarán nuestros nuevos jefes es eliminar cualquier reloj dentro de las oficinas que nos permita saber qué hora es y cuanto nos queda para salir (esto incluye los teléfonos móviles con un doble propósito: el que he mencionado y liberarnos de la alienación y la esclavitud de las nuevas tecnologías), ellos (nuestros jefes) serán por tanto los que decidan cuándo debemos dejar nuestros puestos de trabajo para descansar y no unas impersonales manecillas. 

Es bueno y reconfortante saber que la luz siempre estará encendida para nosotros. En el exterior puede ser de día o de noche, ser un día amable y soleado o desapacible y lluvioso, pero para nosotros siempre será de día y hará sol, la luz artificial y más saludable, ya que no produce cáncer, que nos proporcionarán los tubos fluorescentes. 

Os emplazo para una nueva entrega de cómo sobrevivir a una subrogación y ya sabéis: “nos veremos donde no haya oscuridad”. 

 

martes, 22 de enero de 2013

Caso Bárcenas

En la sede del PP una reunión muy importante entre Rajoy y Cospedal: 

RAJOY: Lola (hay confianza), ¿qué podemosh hacer con lo de los sobresueldosh? 
COSPEDAL: No me consta... 
RAJOY: Vamosh, no me jodash, que ya no hay periodishtash delante. Me refiero a los sobresh con dinero negro que nosh daba Bárcenash (Nota del autor: por eso se llaman sobresueldos, porque es un sueldo metido en un sobre). 
COSPEDAL: No se Mariano, ¿qué propones? En realidad aunque me las doy de ser una zorra sin escrúpulos soy bastante obediente y solo hago lo que me ordenes. 
RAJOY: Deberiamosh entorpecer a la justicia. 

Y Dolores de Cospedal empieza a pensar cómo puede hacer eso y durante días no hace más que darle la vueltas al concepto hasta que se vuelve un poco majareta y comienza a ver algo mágico en la palabra "entorpecer". Al fin y al cabo qué es entorpecer, se dice, sino volver a alguien torpe. Y cómo podría yo volver a alguien torpe, se pregunta. 

Viaje oficial a Brasil, visita el Amazonas. Dolores de Cospedal insiste en entrevistarse con el jefe de una tribu que dicen tiene poderes sobrenaturales. Durante ese fin de semana se somete al rito de iniciación de la tribu que incluye diversas y extrañas prácticas sexuales y aprende el hechizo necesario para volver torpe a la gente. 

Cuando llega a España practica el sortilegio contra el juez que instruye el caso, no encuentra varios ingredientes que solo se encuentran en el Amazonas, pero da igual, aunque no hubiera funcionado... ¿acaso la justicia no es lo suficientemente torpe?

domingo, 20 de enero de 2013

Gorgorito

Ahí estaba Gorgorito, el viejo gorrión solitario, asomado en la azotea del viejo mercado abandonado, viendo a la gente pasar por la calle y soltando de vez en cuando algún que otro gorgorito. Estaba feliz, era unos días de esos de principio de la primavera en la que el sol reluce como nunca y una ligera brisa acariciaba sus plumas marrón parduscas. Si pudiera volar sería fantástico, pensaba sin embargo con cierta melancolía. 


Desde el cielo Pío vio a Gorgorito y haciendo varias piruetas en el aire fue a aterrizar también en el tejado del viejo mercado junto a su primo Pío (los dos se llamaban igual porque los pájaros no son muy originales a la hora de poner nombres). 
-Mira a Gorgorito, ¿crees que se atreverá a lanzarse? –dijo Pío. 
-¿Pero qué dices? Sí Gorgorito no sabe volar, desde aquel accidente que tuvo y se rompió el ala… -contestó Pío. 
-¡Pero eso fue hace mucho tiempo! Seguro que ya tiene el ala bien y puede volar. 
-¿Entonces por qué no lo hace? 
-Sé que esto es muy raro que lo sepa un gorrión, ¿pero conoces el síndrome de indefensión aprendida? 
-No, ¿qué es eso? 
-La indefensión aprendida es un tecnicismo que se refiere a la condición de un ser humano o animal que ha aprendido a comportarse pasivamente, sin poder hacer nada y que no responde a pesar de que existen oportunidades para ayudarse a sí mismo, evitando las circunstancias desagradables o mediante la obtención de recompensas positivas. Seguro que si hubieras leído la Wikipedia lo sabrías. 
-¿Quieres decir que no vuela porque tiene miedo y no porque no pueda? 
-Exacto. 
-Joder, pues di que tiene miedo que no puedes ser más pedante –sentenció Pío que se puso a buscar algún insecto despistado con su pico entre las losetas del tejado del mercado. 
-Oye, ¿y si le ayudamos a superar su indefensión aprendida? 
-¿Cómo? 
Pío se acercó a Pío y le susurró algo al oído. 
-¿Estás seguro? –preguntó éste.
-Completamente –respondió Pio. 
-Está bien, ¡hagámoslo! 
Los dos Pío se fueron acercando a Gorgorito a pequeños y juguetones saltos pero no pararon cuando estaban llegando a su altura y de un empujón precipitaron al viejo gorrión desde el tejado del mercado. Gorgorito vio como se aproximaba al suelo e, instintivamente y después de muchos años, abrió sus pequeñas alas. 
-¡Así se hace viejo¡ ¡Tú puedes volar! –gritó Pío. 
-¡Ánimo! ¡Hasta el infinito y más allá! –gritó el otro Pío. 
Pero desde que Gorgorito tuvo aquel accidente y se rompió el ala no había podido volver a volar. No tenía nada que ver con el miedo, físicamente había tenido lesiones que no pudo superar y aunque abriera las alas no pudo alzar el vuelo, estrellándose contra el suelo. Los dos Píos volaron al suelo donde yacía Gorgorito. 
-¿Estás bien Gorgorito? 
-¿Qué habéis hecho? Cabrones… -dijo Gorgorito maltrecho pero vivo. 
-Lo siento Gorgorito, pensábamos que podrías volar. 
-¿Pero no sabéis que tengo mal las alas desde el accidente? 
-Lo sentimos de verdad… Es que Pío ha leído últimamente mucho a Bucay. 
-Bucay, ese hijo de puta… 
Lo peor es que como el mercado estaba abandonado, Gorgorito no pudo volver a su nido que estaba en el tejado ya que no tenía acceso a las escaleras.

jueves, 17 de enero de 2013

Como sobrevivir a una subrogación (II)

Una de las preguntas más frecuentes a la hora de sufrir una subrogación es “qué me puedo llevar de mi antigua empresa a la nueva”. Para contestar esa pregunta podemos recordar los versos de un poeta por todos conocido: 

Y cuando llegue el día de la subrogación,
y esté al partir la nave que me lleve a Clece
me encontraréis a bordo, ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar. 

He aquí la clave, hay que llevarse las menos cosas posibles (aunque casi desnudo puede ser una exageración), ya que cuando ingresemos en la nueva empresa nos harán pasar por un detector de metales, unos rayos X y finalmente seremos cacheados y, por muy morboso que os pueda resultar eso de que os cacheen, nos quitarán todo tipo de documentación que para la nueva empresa pueda resultar inútil, tales como vuestros contratos, vuestro convenio colectivo, etc. Asimismo nos quitarán todos los objetos de valor: cadenas, pendientes, pulseras, dientes de oro… Debemos tener en cuenta que ninguno de esos objetos superfluos y materiales nos da la felicidad y tampoco nos va a servir para desempeñar nuestra tarea, sin embargo sí pueden ser importantes para maximizar los beneficios de la empresa. 

Recordad, el trabajo os hará libres.

Ningún dato que conservéis de la anterior empresa tiene por qué ser imprescindible y tampoco está muy claro que la Ley de Protección de Datos permita esos trasvases de información. ¿Y cómo podréis trabajar sin todo eso? No os preocupéis, la nueva empresa está provista de la tecnología necesaria para recopilar de nuevo cualquier pormenor acerca de trabajadores, clientes o proveedores. La tecnología en cuestión, a la cual el ser humano ha desembocado gracias a siglos de evolución científica, es la siguiente: 




No hay dinero para goma de borrar.

martes, 15 de enero de 2013

M-clan y telepatía



Este hombre, Carlos Tarque, cantante de M-clan, tiene una cualidad o don muy especial. Es capaz de detectar cuando un grupo de personas está hablando de su conjunto musical y se introduce en el cerebro de alguna de las personas que estén conversando, dominando de esa forma su mente. Eso explica que siempre que se hable de M-clan alguien suelte frases como: “pues no están tan mal”, “me gusta la voz del cantante” o “tengo el último disco y está muy bien”. Lo hace de forma que quien dice la frase olvide que ha sido controlado por un momento y los que la oyen piensen que pueden estar equivocados con respecto a este grupo. Es muy sutil y convincente. 

Yo puedo contar todo esto porque Carlos Tarque no ha llegado todavía a controlar a los que escriben sobre ese grupo. Aunque no digo yo que M-clan sean malos, al contrario, las canciones están muy bien, son pegadizas y el nota canta de puta madre…

domingo, 13 de enero de 2013

Negocios

Dos negocios chulos que deberían llevarse a cabo: 
- Taller de reparación de máquinas de teletransporte- Aunque no existan todavía. Un negocio de futuro, cuando se inventen serás el primero y tendrás ventaja sobre la competencia. 
- Preinstalador de paz mundial- Si algún día alguien encuentra una lámpara que dé deseos (yo ni siquiera encuentro una que pegue con mi salón) y tiene que pedir uno posiblemente pida un aparato de aire acondicionado para su casa ya que por lo menos tiene la preinstalación hecha, sin embargo de la paz mundial todavía no se ha realizado la preinstalación. 

Se podrían unir ambos negocios en uno solo. Esta sería la tarjeta o el anuncio en Páginas Amarillas:



Me gusta el nombre de Talleres Pérez y Pérez para ese negocio, es como mezclar algo super futurísta e idílico con un apellido de lo más vulgar. Al principio con los automóviles seguramente pasó lo mismo, los mecánicos aunque estuvieran haciendo algo muy moderno en su época que era arreglar vehículos, por desgracia no podían cambiarse el apellido.

Y los dos dueños de la tienda se apellidan Pérez y Pérez, ademas se llaman entre ellos por el apellido. ¡Joder, menuda locura de tienda!

jueves, 10 de enero de 2013

Como sobrevivir a una subrogación (I)

Muy probablemente, en unas semanas, todos los trabajadores de la empresa para la que actualmente trabajo pasaremos a trabajar para otra empresa que se va a encargar desde entonces de prestar los servicios que estamos prestando nosotros de momento. Este curioso hecho se llama subrogación y ante las dudas, incertidumbres, angustias y dolores en el dedo meñique del pie izquierdo que están surgiendo escribo esta pequeña guía para que mis compañeras y compañeros se sientan más aliviados (o quizás más confusos, quién sabe).

El trabajador que va a sufrir el proceso de la subrogación pasa por diversas fases: sorpresa, incredulidad, negación, aceptación y, por último, tímido, mudito y dormilón.

Una vez sepamos que vamos a cambiar de empresa es importante tratar de comportarse con normalidad y conservar la calma. Hay que mantenerse alejado de cualquier objeto afilado, fármacos peligrosos, sogas o grandes alturas así como apartar la idea de tu cabeza de coger el primer vuelo que haya al extranjero. Piensa por el contrario que vas a vivir una experiencia original y única, algo que siempre podrás ocultar a tus nietos.

Es muy normal sentir cierto miedo ante el hecho de cambiar de empresa, pero no hay motivo para ello: os aseguro que en la nueva empresa no hay monstruos, insectos gigantes ni fantasmas… Bueno, ¡qué demonios!, quizás si los haya pero uno no se puede dejarse ame… armedr… debe tener valor. Tenemos que aceptar la situación sin dramas, por lo tanto solo acudiremos al teatro o al cine para ver comedias (si la subida del IVA te deja dinero, sino mejor directamente no ir).

A medida que pasen los días y se vaya acercando la fecha del cambio vuestra posición de incredulidad y de “esto es un sueño” pasará a la de aceptación y a “esto es una pesadilla”, hasta que por fin llegue el día. Es inútil, repito, inútil, esconderse ese día debajo de la mesa, en el armario del servidor o en el baño (y en este último caso es, además de inútil, peligroso), Recuerde que en los momentos de tensión es cuando sale lo mejor de uno mismo (esta es otra razón de peso para no esconderse en el baño) finalmente le encontrarán y le pedirán amablemente y posteriormente a la fuerza que desaloje las instalaciones de su empresa actual y ocupe las de la nueva. Una vez esté todo el mundo fuera la oficina será rellenada con cemento.

(Continuará)

martes, 8 de enero de 2013

Mis superpoderes

Desde mi blog y a través de estas líneas me comprometo a usar mis superpoderes solo y exclusivamente para hacer el bien, así como para combatir a los supervillanos P.C. (no es personal computer), J.B. (no es una marca de whisky) y E.L.J. 

Mis superpoderes comenzaron a manifestarse en mí un día cualquiera hace muchos años que me encontraba viendo un partido del Caja San Fernando en el cual estaba siendo vapuleado por algún equipo de medio pelo (como era y sigue siendo habitual). Mientras esto pasaba mis manos jugaban con un lápiz extremadamente afilado que en un momento dado, tras un triple frontal solo del equipo contrario, clavé en mi pierna derecha debido al movimiento involuntario de frustración que en mis extremidades superiores tal jugada me había provocado. El lápiz fue clavado con tal fuerza en mi pierna que podía mantenerse en ella sin sujeción alguna excepto la de la propia pierna. Por extraño que pueda parecer no me dolió ni sangré, aunque todavía tengo la señal un poco por encima de mi rodilla. 

Ignoro que tipo de mina radiactiva tenía ese lápiz pero desde entonces… 

He aquí (¡Eh! ¡Aquí!) mí propósito de año nuevo: a partir de ahora utilizaré mis superpoderes para publicar en el blog tres veces por semana.
Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 3.0 Unported.