miércoles, 10 de abril de 2013

Lo llaman democracia y no lo es (es un semáforo)

La situación actual es como volver en coche del trabajo a tu casa (salvo porque no tienes trabajo y te van a echar de tu casa) y llegar al semáforo que siempre te toca en verde o que si está en rojo tarda poco en ponerse en verde y encontrártelo en rojo y que no cambie.

Es como tener paciencia, aguardar con entereza a que el semáforo cambie, porque siempre has sido muy respetuoso con la ley, a pesar de que sea evidente que está estropeado (o algo) y no lo hace. Escuchar los pitidos detrás de ti y ver como los coches atraviesan sin piedad delante de ti, en la perpendicular de ese cruce que el semáforo supuestamente regula.

Es igual que llamar a tráfico desesperado un par de horas después, sin haber podido atravesar el semáforo todavía y que te digan que según su sistema informático y sus datos el semáforo funciona perfectamente y que no sea impaciente que en algún momento se pondrá en verde.

Es terriblemente parecido a que intentes, muy despacio y con mucho cuidado, saltarte el semáforo porque tienes hambre y sueño y quieres llegar ya a tu casa porque llevas horas en esa situación y nada parece cambiar y que la policía te detenga por ello y te aplique la ley antiterrorista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 3.0 Unported.